Los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE) que han alcanzado el fin de su vida útil por uso u obsolescencia y que se convierten en residuos. Comprende también los componentes, subconjuntos, periféricos y consumibles de algunas categorías de aparatos Eléctricos y electrónicos.

La presencia de metales pesados, contaminantes orgánicos persistentes, retardantes de llama y otras sustancias peligrosas que se pueden encontrar en los RAEE constituyen un riesgo para la salud humana y el ambiente si estos residuos no se gestionan adecuadamente.

Disposición final en rellenos sanitarios, incineración no controlada (quema) y reciclaje informal.

Consiste en el establecimiento de responsabilidades de todos los actores en la cadena de manejo de los RAEE. Desde los generadores que tienen que llevar sus RAEE a puntos de acopio establecidos por los productores directamente o en coordinación con los municipios, hasta su posterior tratamiento ambiental de los mismos por operadores de RAEE. Todo bajo y supervisión de las entidades autorizadas por el Estado.

Las normas específicas sobre manejo de RAEE a nivel nacional están basadas en el concepto de “Responsabilidad Extendida del Productor” de los aparatos eléctricos y electrónicos. Es un enfoque de política ambiental mediante el cual la responsabilidad del productor se amplía a la fase post-consumo del ciclo de vida de un producto, en las etapas de recolección, transporte, tratamiento y disposición final de forma ambientalmente segura.

SUMA Desarrollo Ambiental recibe los residuos sin ningún límite de cantidad.

Cada empresa obtendrá un certificado de los residuos entregados generado por SUMA Desarrollo Ambiental.

El valor del costo de la disposición final dependerá del tipo de residuo entregado, para el caso del Raee se recibe sin costo y en caso de Respel dependerá del tipo, tratamiento y residuo recibido.

El reciclaje de estos aparatos tiene muchos beneficios ambientales. Permite recuperar elementos (como vidrio, plástico y metales) que vuelven al ciclo productivo. Esto disminuye la extracción de materias primas, cuidando los recursos naturales, y reduce la contaminación del aire, el agua y el suelo. Produce beneficios sociales, como la prevención de riesgos en la salud de las personas, porque evita que materiales tóxicos vayan a la atmósfera o a las vías fluviales.

Son aquellos materiales que se generan cuando los productos que utilizamos diariamente en el hogar o en las industrias llegan al final de su vida útil y son desechados. Entre ellos se incluyen envases de plástico, latas de aluminio, vidrio, papel, cartón, ropa, electrodomésticos, baterías, dispositivos electrónicos, y otros productos similares. Estos residuos son comúnmente conocidos como residuos sólidos urbanos, ya que son producidos en su mayoría en ciudades, áreas urbanas y zonas empresariales e industriales.

Rellenos sanitarios: Consiste en la delimitación de un área determinada y en ella realizar una excavación, su capacidad es limitada y los costos implicados en su instalación, puesta a punto, mantenimiento e incluso cierre pueden ser muy altos. Incineración; Se trata de la quema controlada de los residuos en hornos especiales para este fin. Requieren una infraestructura muy especializada y filtros para disminuir la contaminación. Compostaje: Disposición final de residuos enfocados en la materia orgánica y su capacidad como fertilizante natural. Este método implica la descomposición controlada de los residuos mediante la acción de microorganismos. Reciclaje: Proceso mediante el cual los desechos se convierten en nuevos productos o en recursos materiales con el que fabricar otros productos. De esta forma, los residuos se someten a un proceso de transformación eco-ambiental para poder ser aprovechados en algún proceso de fabricación, reduciendo el consumo de materias primas y ayudando a eliminar residuos.